Por: Jorge Salum, Director Senior de Negocios Emergentes para el Caribe y Centro América de Visa.

 

Las regiones del Caribe y Centroamérica  ofrecen a los actores y disruptores de servicios financieros un terreno fértil para la innovación y el crecimiento en pagos, con enormes oportunidades para desbloquear el poder del comercio digital para todos, en cualquier lugar de la región.

La penetración de teléfonos inteligentes supera el 100% y la penetración de transacciones sin contacto supera el 70% en muchos de nuestros mercados. Las tarjetas de débito, las tarjetas prepago y las billeteras digitales están creciendo significativamente, mientras que el acceso a infraestructura de pagos digitales de bajo costo está despegando de maneras innovadoras. Sin embargo, muchos segmentos de la población siguen sin acceso a servicios bancarios y el efectivo aún se usa ampliamente.

Este panorama brinda enormes posibilidades para acelerar la transformación digital de la región y liberar oportunidades para que millones de ciudadanos participen activamente en la economía digital global. Pero impulsar esta innovación a gran escala requiere un esfuerzo colectivo, por lo que en Visa vemos nuestro trabajo colaborativo con fintechs como una de nuestras mayores oportunidades y una parte fundamental para realizar nuestra misión: Ayudar a prosperar a todos en todo lugar.

Al combinar tecnologías emergentes como computación en la nube, IA o blockchain con la infraestructura existente como las Tarjetas de Débito Visa, que pueden recibir remesas y pagos P2P en tiempo real, las fintechs están reinventando el ecosistema de pagos moderno y transformando el ritmo de la innovación en el sector de servicios financieros. Hoy en día, hay más de una docena de subsectores fintech emergentes (Banca como servicio, Cumplimiento como Servicio, insure-tech, Pago en Cuotas o Buy Now Pay Later (BNPL), pago de facturas, P2P), cerrando las brechas en el ecosistema de pagos y reimaginando la experiencia.

En Visa, estamos a la vanguardia de esta revolución, forjando colaboraciones y sinergias con más de 2,000 fintechs en todo el mundo, que nos están ayudando a captar nuevos flujos de pagos, co-crear nuevas formas de pago, llegar al mercado más rápidamente  y acceder a nuevas capacidades que complementan las nuestras. Lo vemos como una estrategia ganadora que nos está permitiendo acelerar la adopción de soluciones de pago nuevas y más accesibles para empresas, gobiernos y consumidores por igual.

Pero más allá de este enfoque colaborativo, también nos comprometemos con el ecosistema fintech a través de varios programas y certificaciones como Visa Ready, nuestro programa Fintech FastTrack o Fintech Partner Connect, que proporcionan a las fintechs la escala y la experiencia que necesitan para navegar las complejidades de los pagos y el comercio digital. Nuestra competencia global Visa Everywhere Initiative también ofrece una plataforma para que las fintechs den forma al futuro del comercio. Desde su inicio en 2015, ha atraído a casi 15,000 startups, destacando la capacidad del programa para fomentar la innovación de manera colaborativa.

Un ecosistema fintech vibrante en la región

En el Caribe y Centroamérica, el ecosistema fintech está creciendo consistentemente en fuerza y relevancia. Actualmente, hay más de 300 fintechs en la región que se están convirtiendo en motores clave para la innovación y la inclusión digital para millones de personas y pequeñas empresas.

En Visa, somos parte de esta transformación, contribuyendo a fortalecer la comunidad fintech de la región y su impacto. Como parte de nuestros esfuerzos, somos miembros activos de asociaciones fintech en Guatemala, Honduras, El Salvador, República Dominicana y Costa Rica, lo que nos ha brindado una oportunidad única para estar constantemente conectados y trabajar juntos para expandir pagos digitales más seguros, ágiles e interoperables mientras ayudamos a dar forma a la evolución de la industria fintech en esos mercados.

Nuestra colaboración con múltiples fintechs de la región también marca un paso significativo en nuestros esfuerzos por avanzar los pagos digitales a nivel local con soluciones de bajo costo y accesibles que están beneficiando a todos los participantes. Esto va desde la entrega de pagos P2P y emisión digital instantánea con billeteras digitales como Nequi y Zinli en Panamá y TENGO en Honduras, hasta apoyar la expansión de fintechs establecidas como Kash en el movimiento de dinero transfronterizo en Centroamérica. Paralelamente, estamos trabajando con diversas fintechs para apoyar a las pymes en su transformación digital. Estas incluyen Fygaro, un ganador de nuestra iniciativa Visa Everywhere, en toda la región; MIO en República Dominicana con foco en medianas y pequeñas empresas y Food Drop en Trinidad y Tobago, todas las cuales ayudan a las pymes a vender en línea. Asimismo, estamos trabajando con fintechs para apoyar a los gobiernos en su proceso de adopción de pagos digitales, que es justamente el foco de nuestra asociación con el proveedor de infraestructura de pagos, AnglPay, en Trinidad y Tobago.

Los fundamentos de las fintechs siguen siendo fuertes y, a pesar de la volatilidad actual, hay varias áreas, incluyendo los neobancos/banca comunitaria, monedas digitales, pagos en tiempo real y billeteras digitales, que creemos impulsarán el crecimiento y la innovación continuos en nuestra región y más allá en el mundo de las fintechs y los pagos.

El sector fintech se ha convertido en una fuerza transformadora que desbloquea capacidades financieras digitales sin precedentes, históricamente no vistas en la banca comercial. Y estamos orgullosos de desempeñar un papel fundamental en todo este esfuerzo colectivo.

Estamos emocionados por las posibilidades del espacio fintech, especialmente en el Caribe y Centroamérica, donde nuestra cartera de socios fintech es diversa y sigue creciendo y escalando. Como líder mundial en pagos digitales, en Visa esperamos ayudar a las fintechs a expandirse en la región, aprovechar nuestras fortalezas y seguir impulsando juntos el futuro del movimiento de dinero de manera ágil e inclusiva.