Por: Yamilet Zachrisson, Chair del Comité de Educación / Sr. Legal Counsel - Dell Technologies
En los últimos 3 años, hemos vivido sucesos cardinales en el desarrollo de nuestras sociedades y economías. Se han presentado desafíos globales en temas de salud, tecnología, logística, ambiente y seguridad como, por ejemplo: la pandemia de SARS-COV-2, la agresión rusa en Ucrania, los reportes del IPCC sobre el cambio climático, la posibilidad de que Panamá participe en la cadena de producción de semiconductores y el avenir de la inteligencia artificial generativa. Estamos en un momento coyuntural en nuestra historia y para ser exitosos, necesitamos contar con el capital social necesario para afrontar estos desafíos. Entonces surge una pregunta fundamental: ¿Está nuestra fuerza laboral capacitada para afrontar los desafíos de esta década?
Para responder a esta pregunta, primero debemos estimar cuál será la demanda laboral y en qué disciplinas. Afortunadamente, el mes pasado tuvimos el placer de contar con la Dra. Milena Gómez Cedeño, Gerente Educativa - Rectora del ITSE y la Dra. Ivonne Torres Atencio, directora del Departamento de Farmacología de la Universidad de Panamá, en una conferencia para el Comité de Educación y el Comité de Salud de AMCHAM sobre el estado de la educación en Panamá en el sector de la salud. De especial relevancia para el presente tema es la estimación del ITSE sobre los empleos que se generarán en los próximos años. Según datos de la ONU, en el 2040 el 75% de los empleos estarán relacionados con las disciplinas STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés).
Teniendo en cuenta esta demanda, ¿nos encontramos en una buena posición para suplirla? Si vemos los resultados de las pruebas PISA del 2018, de los estudiantes de 15 años que presentaron la prueba, la mayoría no contaba con los niveles mínimos requeridos en matemáticas, ciencias y lectura. Y aunque la cobertura bruta del sector de la educación se encuentra en crecimiento (~47% para el 2015) según cifras del BID, el mismo reporte nos muestra que el porcentaje de educación superior entre los 29 – 65 años es sumamente bajo. Al fin y al cabo, la gran mayoría de nuestra fuerza productiva se encuentra en este rango de edad.
Enlazando las ideas antes expuestas, estamos en un momento coyuntural para la historia de Panamá y el mundo en el cual necesitaremos incrementar la oferta de nuestra fuerza laboral calificada en disciplinas STEM de tercer nivel. Aunque el porcentaje de cobertura en la educación superior ha crecido en la década pasada, aún existen deficiencias en la educación secundaria para matemáticas, lectura y ciencia y en la educación superior para personas entre los 29 y 65 años para lo cual se requieren esfuerzos para incrementar la cobertura de la educación superior para mayores de 29 años.
Siempre que se habla de falencias en educación nos puede quedar un sin sabor en la boca, un sentimiento de desesperanza; pero en el futuro cercano vemos increíbles oportunidades. Estamos a tiempo, y enfocándonos en los problemas correctos podremos hallarnos en un futuro increíble para nuestro país y para nuestros jóvenes.
A todos los miembros de AMCHAM los invitamos a participar en El Comité de Educación para estar al tanto de temas relevantes sobre la educación en Panamá. Nuestro objetivo es contribuir a los miembros y representarlos al igual que trayendo datos y temas de actualidad. Si desean participar, los invito a contactarme [email protected].